Tras varios ires y venires el este regulador permite que tanto jugadores como clubes asuman el 50 % de los impuestos de las comisiones de representantes
Después de varias revisiones que se reportaron a las arcas de Hacienda más o menos unos 1.000 millones de euros en cinco años, el fútbol gana una batalla. Ahora la Agencia Tributaria aceptará que la tributación por las comisiones de los agentes puedan hacerse responsables tanto a jugadores como a clubes.
Atlético de Madrid ha sido el pionero en que la representación dual se lleve a cabo. La Agencia Tributaria admitirá que un representante pueda trabajar para las dos partes, jugador y agente sin problema alguno. Las inspecciones realizadas por Hacienda daban a las comisiones la consideración de ingreso por parte del futbolista, con lo que las gravaba con el IRPF.
Reformas que Hacienda considera para hacer más justo el pago por los servicios de los agentes
Antes de que Hacienda interviniera en temas del balompié, los agentes realizaban facturas a los respectivos clubes. Cobro al que se le aplicaba el 20 por ciento del IVA. No obstante ahora la Agencia Tributaria radica que los agentes son empleados de los jugadores y por ende estos deben asumir el pago de sus servicios.
Cabe señalar que los representantes trabajan sobre el 3 % y el 5 % sobre los traspasos. En el último mercado de pases previo a la pandemia, la Liga española gastó 1.300 millones en 350 fichajes. Ello podría suponer en torno a 65 millones en comisiones, de los que la mitad irían a las arcas de Hacienda con el criterio mantenido hasta ahora.
Criterios que no estiman devoluciones por ningún concepto
Hacienda en un tiempo exigió el pago a los futbolistas, pero, al mismo tiempo hizo un llamado de atención a los clubes por no haber tomado medidas y no haber hecho las respectivas sanciones. Ahora, con el nuevo concepto, las operaciones y/o conflictos tributarios no tendrán ningún tipo de retroactivo.,
En algunos pleitos e inspecciones, Hacienda tomó información de medios de comunicación en las que jugadores y agentes hablaban de sus relaciones profesionales; y en la mayoría de estas no existe ningún vínculo contractual. Lo que Agencia Tributaria suponía como una relación profesional entre las partes.