El acuerdo más revolucionario en décadas: 36 equipos, dos grupos, más grandes duelos y un modelo de emisión global sin intermediarios
El fútbol europeo podría vivir su mayor transformación desde 1992. La UEFA y los impulsores de la Superliga negocian una nueva versión de la Champions League que podría estrenarse en 2027, coincidiendo con el nuevo ciclo de derechos audiovisuales. Sobre la mesa ya hay un esquema avanzado. La competición pasaría a contar con 36 equipos, divididos en dos grupos de 18 según el ránking UEFA. Cada club disputaría ocho partidos de fase de liga (cuatro en casa y cuatro fuera), enfrentándose solo a rivales de su grupo.
El Top-8 del Grupo 1 accedería directamente a los octavos de final, mientras que aún se debate cómo clasificar a los otros dieciséis: se barajan opciones como un play-in o unos dieciseisavos de final. El objetivo es claro: más choques entre gigantes cada semana. Partidos como Real Madrid–City, Bayern–Liverpool o PSG–Barça podrían convertirse en habituales, eliminando los cruces contra rivales menores y elevando el espectáculo global.
Premios récord y una revolución en la televisión
La nueva Champions promete una subida histórica en los premios económicos. Los clubes recibirían más dinero tanto por participar como por avanzar de ronda o ganar el torneo, gracias al nuevo reparto de ingresos y a la eliminación de intermediarios.El gran salto llegaría con la televisión. La UEFA planea lanzar su propia plataforma de streaming posiblemente llamada “UNIFY” inspirada en el modelo digital que proponía la Superliga.
El servicio permitiría ver todos los partidos en un único lugar, y se estudia ofrecerlo gratis o a un precio muy bajo, siguiendo la filosofía que defendía Florentino Pérez: un fútbol accesible para todos, con opción de pago sin anuncios.Sin las televisiones tradicionales de por medio, los ingresos irían directamente a los clubes y el acceso sería global, con contenidos adaptados a cada país y formatos multiplataforma. Una auténtica revolución en la forma de consumir el fútbol europeo.
Florentino Pérez y el Real Madrid, de nuevo en el epicentro del cambio
Detrás de este viraje estratégico está, una vez más, Florentino Pérez. El presidente del Real Madrid ha defendido durante años la necesidad de modernizar la Champions, de hacerla más competitiva y global, y ahora la UEFA parece dispuesta a escuchar para evitar otra guerra institucional con la Superliga.
El plan busca un punto intermedio entre tradición e innovación: preservar el prestigio del torneo, pero con una estructura más atractiva y sostenible. El Real Madrid, como en 1992 cuando impulsó el paso de la Copa de Europa a la Champions League, vuelve a situarse en el centro de la historia.
