El equipo de Abramovich vive una situación parecida al Real Madrid porque necesita deshacerse de piezas de gran valor (Hazard Óscar, o Diego Costa) ya que su proyecto se ha agotado y formar uno nuevo. Si no consigue enderezar su ritmo terminaría quedándose sin competición europea, algo que afectaría de lleno a su balanza financiera, que ahora mismo es negativa. La sanción aumentaría la crisis en la que está sumida el equipo y perderían bastante millones por patrocinadores y derechos televisivos.