La Champions League cuenta en cada edición con numerosos sponsors de diferente índole: tecnología, vehículos, bebidas… Sin embargo este año, la máxima competición europea ha perdido uno de los patrocinios más importantes que poseía, con el cual ha mantenido nada más y nada menos que dos décadas consecutivas de apoyo.
Se trata de la multinacional estadounidense fabricante de vehículos Ford, que ha preferido destinar el dinero con el que patrocinaba la Champions League a mejorar las técnicas de marketing en el mercado europeo, debido a los malos resultados económicos obtenidos en la venta de sus coches.
Ford, junto con la empresa cervecera Heineken, eran las dos marcas que más dinero aportaban a la Liga de Campeones, con cifras en torno a los 46 millones de libras (55 millones de euros). El presidente de Ford Europa, Stephen Oden, comentaba la elección: “Ford y la UEFA se han beneficiado de nuestra asociación, ahora es el momento adecuado para que Ford se mueva en una nueva dirección”.
Fuente: Futbolete