La posición actual de Rusia parece incomodar a diversos organismos mundiales, su intento de seguir en guerra con Ucrania por cuestiones geopolíticas sólo provoca que poco a poco las quejas lleguen a ser implementadas a través de documentos oficiales y que den como consecuencia la anulación del próximo Mundial de fútbol.
Para ser más claros, la Unión Europea ha estado trabajando en un documento en donde se hablan de las sanciones de dicho acto ruso; es una acción que surgió a través del G7 y donde éste mismo abogó por suspender la participación de Rusia en los grandes eventos culturales, económicos y deportivos.
Si se avalaran las sanciones, la FIFA sufriría un gran golpe económico. De acuerdo al informe financiero presentado por el organismo, se invertirán 2.153 millones de dólares en los próximos cuatro años. Los gastos incluyen la organización del evento, producción de televisión, premios a los participantes, marketing y los más seguro más rubros no especificados.
Por otro lado, Rusia ha estimado una inversión de 17 mil millones de dólares para organizar el Mundial dentro de cuatro años.
Para poner más conflicto a la situación, la Unión Europea ha decidido reducir el acceso de Rusia a los mercados de capitales europeos, ha impuesto un embargo a su venta de armas, los bienes de doble uso militar y civil y por supuesto ha limitado la venta de tecnología sensible y equipamiento para el sector petrolero.
Por @Edu_Aveiro