En busca de un modelo de negocio similar al de la Premier League, la LFP sigue luchando por la negociación colectiva de los derechos de televisión. Aunque la respuesta del Gobierno a la carta de Javier Tebas se hace esperar, la LFP ya ha definido su objetivo, 1.500 millones de euros por temporada.
Con el objetivo de entender las implicaciones de un modelo realmente más equitativo para los equipos modestos, hemos decidido calcular cómo se hubieran repartido los hipotéticos 1.500 millones de euros la pasada campaña en caso de que la LFP hubiera utilizado el modelo de la Premier League, esta cifra es la que pretende la LFP en el nuevo contrato de negociación conjunta a partir de 2016.
En base a dicho modelo y considerando las diferencias entre ambas ligas hemos utilizado los siguientes criterios:
- un 50% de los ingresos sería repartido de forma equitativa entre los veinte equipos de la liga.
- Otro 25% se repartiría de acuerdo a las veces que los partidos de dicho equipo han sido retransmitidos. En este apartado hemos considerado de nuevo un reparto equitativo ya que, a diferencia de la Premier League, todos los partidos de la liga son televisados.
- El último 25% sería repartido de acuerdo a la posición ocupada por cada equipo al final de la temporada. Así el último clasificado obtendría 1,79 millones, el penúltimo el doble de esta cantidad, el antepenúltimo el triple, y así sucesivamente.
En la siguiente tabla pueden observarse los resultados de un reparto imaginario del que se beneficiarían todos los equipos salvo el Real Madrid y el FC Barcelona.
*El modelo Premier tenemos que basarnos en una clasificación definitiva. Por ello, el Betis, Osasuna y Valladolid están, ya que hemos tenido que utilizar la clasificación del año pasado.
Como resultado puede observarse que la relación entre los ingresos del primer y último clasificado se vería reducida a un 1,58:1, una cifra impensable con el actual reparto. Al mismo tiempo, los méritos deportivos cobrarían más importancia ya que, de acuerdo a nuestra hipótesis, los ingresos del primer clasificado – Atlético de Madrid en este caso- superarían a los del segundo, algo muy lejos de la realidad en cualquier temporada en la que ni Real Madrid ni FC Barcelona fueran campeones.
Si bien los equipos con más ingresos parecen dispuestos a negociar, en ningún caso aceptarían un cambio radical como el descrito en este artículo. Es por ello que los clubes habrían acordado ciertas cláusulas de acuerdo a las cuáles ‘los grandes’ seguirían saliendo beneficiados. Aunque el contrato no está aún cerrado, un comentado ejemplo sería la distribución de un 25% de acuerdo a número de abonados, entradas vendidas y número de seguidores.
Pedro Iriondo @PedroIriondo