Para aquellos clubes ahogados por las deudas y que no generan suficientes ingresos de explotación para ir pagando las mismas o que no tienen accionistas dispuestos a invertir millonadas como por ejemplo los Agnelli en la Juventus o no quieren (o no pueden) que un magnate les compre el club (como por ejemplo acaba de hacer el Inter con un magnate indonesio) siempre tienen un último recurso: la venta de activos, es decir, del estadio o de jugadores.
Eso es lo que hizo el Espanyol con el estadio que tenía en el exclusivo barrio barcelonés de Sarriá en 1997. En su momento parecía un drama total pero desde la venta del mismo al club no le ha ído mal en lo deportivo (no ha vuelto a bajar a segunda, ha ganado dos copas del rey y fue subcampeón de la UEFA) y ahora tiene un estadio nuevo (eso sí, en una zona menos exclusiva) y su posición financiera no es tan dramática como la que tenía en los años noventa.
Uno de los principios contables es el de prudencia y dice que los activos deben ser valorados a su precio de adquisición (coste histórico) con lo que se infravaloran los mismos. En el balance de p.ej Real Madrid o Barcelona no se refleja el valor actual de sus instalaciones o de sus futbolistas sino el coste que tuvieron en su momento menos la amortización acumulada. Dicho de otra manera, el valor de mercado de p.ej Messi no está reflejado en el balance del club, con lo que sólo vendiendo a este jugador el club azulgrana, tan obsesionado como está la junta directiva actual con el tema de la deuda, liquidaría totalmente la deuda bancaria con su venta.
En su momento la junta anterior del Barcelona se planteó la venta de activos como el Mini estadi y de otros terrenos que tenía como los de Can Rigalt para mejorar la situación económica. Y el Real Madrid también acudió en su día a la venta de activos (su vieja ciudad deportiva) para sanear su posición financiera.
En caso de estar muy ahogados Real Madrid y Barcelona siempre se podrían vender sus estadios (u otros activos) por una burrada, estar un tiempo de alquiler (como hizo el Espanyol) y construir uno más pequeño en una zona menos exclusiva.Dos de los clubes más exitosos de la historia del fútbol, el Milan y el Inter, no han tenido nunca un estadio de propiedad y ello no ha sido ningún problema para que cosecaharan grandes éxitos deportivos. Los grandes activos que tienen los clubes de fútbol españoles son un as en la manga muy importante que debe ser tenido en cuenta.