Las regulaciones financieras en el fútbol español se han vuelto cada vez más visibles y prácticamente la manera más eficiente para llevar un control y no generar inconvenientes futuros. Sin embargo, muchas de las regulaciones parecen ser las limitantes de muchos equipos, en especial chicos.
Un equipo depende en gran medida de sus ingresos para poder solventar todos los gastos ocasionados durante la temporada; los ingresos pueden ser originados por entradas a estadios, venta de producto, licencia de marca, derechos televisivos, premios económicos por competiciones, inversiones futuras, deuda e inclusive dinero proveniente de viejos o nuevos socios. Este dilema entra en gran problemática cuando vemos que por ejemplo el Real Madrid no tendrá la misma cantidad de ingresos que el Almería.
Con base a lo anterior es que se ha estipulado en nuevo tope salarial para los equipos de la liga española. Todo parte con la idea de que dichos gastos no superen el 60% de sus ingresos totales y nuevamente retomamos la intriga, pues es obvio que existirá una gran brecha entre los equipos grandes y pequeños y lo que puede fungir como ayuda ahora parte como el muro de algunos equipos.
Este es el tope salarial, en millones de euros, de los equipos españoles para la temporada 2014-15:
- Barcelona: 347,9
- Real Madrid: 328
- Atlético de Madrid: 105
- Sevilla: 78,6
- Valencia: 73
- Athletic: 49,9
- Villarreal: 44,2
- Real Sociedad: 38,9
- Espanyol: 32,2
- Málaga: 27,5
- Granada: 22,8
- Celta: 18,7
- Getafe: 18,7
- Levante: 17
- Rayo: 15,8
- Deportivo: 15,3
- Córdoba: 14,2
- Eibar: 12,8
- Elche: 12,5
- Almería: 11,7
