Un futuro esperanzador emerge en Zaragoza, donde las instituciones locales y el Real Zaragoza están trabajando codo a codo para dar vida a una renovada Romareda.
Un Acuerdo en Horizonte Cercano
Tras la renuncia del Real Zaragoza a financiar íntegramente las obras para el nuevo estadio, el Ayuntamiento y la DGA están buscando formas de generar ingresos para su realización, con la visión de inaugurarlo en julio de 2024. El camino más firme apunta a la creación de una sociedad mercantil que involucre tanto a las instituciones como al club.
Natalia Chueca, la alcaldesa de Zaragoza, ha encargado a su equipo el desarrollo de un informe técnico y un cronograma que facilite la creación de una estructura jurídica y financiera que permita alcanzar el objetivo dentro del plazo estipulado.
El reloj no se detiene
La candidatura para el Mundial 2030 presiona los tiempos, y Zaragoza no puede permitirse dilaciones. Es indispensable que el nuevo estadio esté funcionando para julio de 2024 para no perder terreno en la selección de las ciudades anfitrionas.
Fórmulas y Alternativas
La sociedad mixta, con capital privado y participación municipal, similar a la que gestiona el tranvía de Zaragoza, surgió como una opción viable. Sin embargo, aplicar esta fórmula al estadio presenta complejidades, principalmente al encuadrar la explotación de un estadio como un servicio público.
Entre las alternativas se contempla que las instituciones se encarguen de la construcción del estadio, y luego establezcan un canon o alquiler al Real Zaragoza. Este camino, aunque viable, exige un proceso de contratación más riguroso, cumpliendo con los requerimientos que rigen a las administraciones públicas, superiores a los de una empresa privada.
Buscando inspiración en San Mamés
La referencia al estadio del Athletic Club de Bilbao se destaca como modelo exitoso en este tipo de emprendimientos, siendo una de las apuestas del presidente de Aragón, Jorge Azcón, durante su mandato como alcalde.
Jorge Mas, presidente del Real Zaragoza, se ha mostrado abierto a colaborar con las administraciones y señala al nuevo estadio como uno de los pilares fundamentales para el futuro del club.
Compromiso y Colaboración
El Real Zaragoza está dispuesto a involucrarse en el proyecto hasta con un 40%, tanto en el capital social de la posible sociedad como en la financiación de las obras. Los rendimientos de la infraestructura, estimados en 14,7 millones de euros anuales, serían compartidos en función del porcentaje de participación en la entidad.
Encuentros Decisivos
Los próximos encuentros entre Chueca y Azcón, junto con la participación de otras instituciones, serán fundamentales para definir el camino a seguir. La inclusión de otros actores, como la Diputación Provincial y el Consejo Superior de Deportes, podría dar un nuevo impulso al proyecto.
Financiamiento y Próximos Pasos
En medio de un panorama financiero desafiante, surgen varias estrategias para obtener los recursos necesarios para la obra, desde la venta y recalificación de suelos públicos hasta préstamos del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Los retos son notables, pero la determinación y el compromiso compartido señalan un camino esperanzador hacia la renovación de La Romareda, un proyecto que busca revivir el espíritu deportivo y comunitario de Zaragoza, marcando un nuevo inicio para el Real Zaragoza y su afición. El objetivo está claro: un estadio moderno, seguro y representativo, que albergue la pasión y la tradición futbolística de la ciudad, estableciendo a Zaragoza como una de las sedes principales en la candidatura para el Mundial 2030.
