El Mundial de clubes ha terminado y las cuentas empiezan a trascender en los medios, ya que el gasto de la inversión del país africano ha sido cuantioso. Ahora, días después del final, la cifra que se maneja es nada más y nada menos que 25 millones de euros, de los cuáles un porcentaje cercano al 15% está invertido en alojamientos y transportes de clientes de alto nivel.
En este sentido, lo que más gasto ha producido ha sido la renovación del estadio dónde se ha disputado el campeonato, ya que la cifra alcanza los 20 millones de euros. El rey de Marruecos, Mohamed VI, suspendió de forma provisional las actividades del ministro de deportes, Mohamed Uzin, y le impidió asistir a la final que el Real Madrid ganó ante el San Lorenzo, lo que hace de ello la nota negativa de la gran fiesta del fútbol que se vivió en Marrakech
