La buena temporada realizada por el Celta de Vigo le ha permitido clasificarse para disputar la próxima edición de la Europa League. Como era de esperar, el precio de los abonos se han incrementado al poderse disfrutar de competición continental en Balaídos, pero lo que no se esperaba es que el precio del abono básico, el que no incluye partidos europeos, también se incrementase en un 10% en una decisión que no ha gustado nada a la afición.
Ante la presión, la directora del departamento de Marketing y Finanzas de la entidad tuvo que comparecer para explicar el porqué de estos precios tan elevados. Maruxa Seoane aseguró que “es una nueva grada que ha exigido una reubicación de los asientos al sufrir una reducción del aforo en beneficio de mejores accesos y organización. La parte de tribuna baja (anteriormente preferencia) que tendrán nuevos precios”. Esta explicación situó a la nueva estructuración del Estadio de Balaídos como la principal culpable del alza de los precios, algo que aunque pueda parecer lógico, no terminó de convencer a los aficionados.
Maruxa Seoane, directora del departamento de Marketing del Celta: “El Celta debe ser más competitivo de lo que lo es”
El nuevo abono que incluye competición europea se ha incrementado hasta un 20% más con respecto a lo que los aficionados pagaron la pasada campaña, un 20% más que igual que puede permitir recaudar ingresos, puede responder a la ley de la oferta y la demanda observando como una estrategia a corto plazo tan táctica puede provocar un rechazo del cliente (los aficionados) y por lo tanto un descenso de los abonos.
A sabiendas de que los abonos de fútbol tiene un precio más elevado que la media europea, nos encontramos con un panorama totalmente específico para la Península Ibérica, donde premia más el dinero que el propio apoyo de los aficionados. La opción de recaudar ese 20% más o 10% en abonos normales es cierto que puede permitir cubrir gastos o reducir distancias con lo ganado el año anterior, pero asimismo puede encontrar a unos socios que no puedan asumir ese 20% de incremento, de manera que reducen su mercado de clientes a dejar pasar una variable tan importante como es la renta de los que consumen tu producto.
Varios socios y aficionados se han echado las manos a la cabeza, más si cabe cuando muchos aseguran que el Celta está intentando igualarse demasiado pronto a los clubes de arriba de la tabla y esto puede ser algo perjudicial para la entidad. En el caso del precio para un adulto, aunque raramente una familia únicamente saca un abono sino que suele ir un acompañante más, pero atendemos también a esta posibilidad, el precio más rentable lo encontraríamos en el fondo lateral con un precio bastante asequible como son 160 (abono normal) – 174 euros (abono total). Sin embargo, ya de aquí pegamos un salto a casi los 300€ por temporada, hasta un máximo de 737€ en tribuna alta, además de tener que asumir una cuota de alta por ser nuevo abonado.
Aquí tenéis la lista de precios:
Esto demuestra las dimensiones que toma el fútbol y como la distribución de la tabla clasificatoria puede ser motivo de alegría y también de rascarse un poco más el bolsillo. Desde aquí os lanzamos una pregunta, ¿debe establecerse una frontera de precios en los abonos de los clubes españoles? ¿Es bueno para nuestro fútbol la libertad de precios que hay? Intenten responderlo ustedes mismos…