Café, pan y mermelada de desayuno. Sopa, fideos con jamón y ensalada de almuerzo y antes de dormir, pan, queso y margarina. Esta será la alimentación a la que deberá acostumbrarse el famoso dirigente del Bayern de Munich. Uli se levantará a las 5:50 de la mañana y a partir de las siete tendrá un trabajo asignaco por el juez. Sobre las once y doce podrá comer para luego retornar al trabajo. Ya por la tarde, dispondrá de dos horas libres para relajarse.
Las celdas de esta prisión legendaria y antigua en la que el dictador Adolf Hitler comenzó a escribir el documeno “Mi lucha”. La celda mide ocho metros cuadrados y su mobiliario es más que espartano, una mesa, una cama, una silla, un lavabo, un retrete y un armario. El único objeto de lujo es un televisor, pero evidentemente sin satélite de pago, luego no podrá seguir los partidos del Bayern.La directora de la penitenciaría, Monika Gross, así describía la situación: “Todos reciben el mismo trato”. Lo que significa que no habrá privilegios para el preso más famoso.
La directora de la penitenciaria no permitió preguntas pero dejó claro que “todos entran en régimen cerrado hasta que, a falta de 18 meses, se les concede la posibilidad de trabajar fuera de la cárcel”.