La Premier League comienza a estar en entredicho, después de que el ex-ministro de deportes inglés Richard Caborn afirmase que la liga inglesa necesita un “cambio en el futuro”. La venta centraliza de los derechos televisivos por un valor cercano a los 5 mil millones de libras ha dejado obsoletas las bases legales y económicas a las que llegó la Premier en 2005, momento en el que se acordó la venta centralizada de los derechos televisivos.
Según Carborn, esas promesas de financiación a las que la Premier llegó con la Comisión Europea en 2005 deben incrementarse al 10% de los ingresos recibidos tanto por la venta al extranjero como por la venta de los derechos televisivos a cadenas locales. Sin embargo, la Premier League no está dispuesta a llegar a esas cifras afirmando que la cantidad recibida por la venta de los derechos de manera nacional es más que suficiente.
“Debería haber un nuevo acuerdo con la Premier League basado en los principios acordados en 2015, pero incluyendo la remuneración extranjera que recibe la máxima categoría inglesa. Es bueno para la Premier” aseguró Richard Caborn. Para él, los ingresos se tendrían que distribuir entre los 20 clubes siendo de la siguiente manera, un 6% hasta los 1.2 mil millones de libras, 7,5% hasta 1,4 mil millones y hasta un 10% cuando se superen los 1,4 mil millones de libras.
La fórmula que ofrece Richard Caborn, la cual ha tratado ya durante mucho tiempo a través de mensajería con la a Premier, asegura que dicho reparto es el más equitativo posible, ya que daría un gran beneficio a todas las partes afectadas.
Por contra, el ministro de deportes Clive Efford ha asegurado que es una vergüenza que no se decidiese invertir en infraestructuras y mejores instalaciones, premiando a la cantera en estos años de bonanza económica que se aproximan en la competición inglesa.
Cada vez son más las altas voces que juzgan el modo de “distribuir” esa gran suma de dinero que tendrá la premier en sus manos en menos de un año. Por ello, la presión popular quiere aprovechar los ingresos extranjeros para obtener un reparto más equitativo además que ventajoso para terminar de situar a la Premier League como la mejor liga del mundo.