Pese a que el jugador jura que su gesto a la hora de celebrar un gol no fue un ataque contra la comunidad judía sino un homenaje a un humorista galo, a Anelka le está pasando una factura muy cara ser tachado de antisemita. Por lo pronto, la Premier ya plantea sancionarle con 5 partidos, además de la repulsa que ha generado entre la gran mayoría de aficionados de la Premier.
El propio West Bromwich, que fichó a Anelka como gran estrella de esta temporada, se ha visto desbordado por la situación y la acción le ha pasado factura directamente entre sus patrocinadores. Y es que Zoopla, el principal sponsor del club, ha retirado su apoyo económico, lo que supone un varapalo importante para las arcas de la entidad. Este portal inmobiliario tiene como copropietario a Alex Chesterman, un poderoso magnate judío.
El conjunto jugó ayer contra el Everton su primer partido sin publicidad en la camiseta, justo el día en el que debutaba Pepe Mel en el banquillo. Como venganza, el West Brom ha puesto todas las camisetas con el sponsor a mitad de precio. Ahora toca buscar nuevos patrocinadores y esperar que la famosa ‘quenelle’ se olvide cuanto antes.