Girona se separa del Manchester City para jugar en la Champions League

En el vibrante mundo del fútbol europeo, la independencia y la autonomía de los clubes a menudo se ven opacadas por grandes conglomerados y asociaciones con otros equipos. Sin embargo, el Girona FC está tomando medidas decisivas para cambiar esa narrativa. Después de una temporada excepcional, en la que incluso superaron al Barça de Xavi, el equipo catalán ha conseguido un lugar en la próxima edición de la Champions League. Pero, para participar, deben enfrentar y resolver un tema crucial, su relación con el Manchester City.

El desafío de cumplir con la normativa de la UEFA

Actualmente, la propiedad del Girona se divide entre varios actores significativos: Pere Guardiola, el empresario boliviano Marcelo Claure, y el City Football Group, parte del Abu Dhabi United Group. Este último posee una parte considerable del club y controla varios equipos, incluyendo tanto al Girona como al Manchester City. Ahora, ambos clubes podrían encontrarse en la Champions League el próximo año, situación que plantea un desafío significativo debido a las normas de la UEFA.

Independencia y Gestión Administrativa del Girona

La UEFA establece claramente en su artículo 5.01 sobre la integridad de la competición que ningún club puede, directa o indirectamente, influir en la gestión de otro club que participe en la misma competición. Esto significa que el Girona debe demostrar su independencia, especialmente en la gestión y las decisiones administrativas, para evitar conflictos de interés y cumplir con las reglas.

Los cambios necesarios en el consejo de administración

Para asegurar su participación en la Champions League y demostrar su independencia, el Girona debe realizar ajustes significativos en su estructura administrativa. Esto incluye la necesidad de que algunos miembros del consejo, que tienen roles en ambos clubes, renuncien a sus posiciones en el Girona. La evidencia de una verdadera autonomía administrativa será crucial para cumplir con las regulaciones y permitir que el equipo compita sin restricciones.

La independencia deportiva también es fundamental

Más allá de la administración, el Girona debe asegurarse de que Manchester City no ejerza influencia alguna sobre sus decisiones deportivas. Aunque Quique Cárcel ha sido el encargado de estas áreas, el club debe demostrar de manera concluyente que las decisiones deportivas se toman de manera independiente, sin intervención del City.

El girona y su camino a la independencia para jugar en champions

Consolidando la independencia y afirmando la identidad

Sin duda, este “divorcio” administrativo y operativo no solo es un paso necesario para cumplir con las reglas, sino que también es un paso hacia la madurez como club. Permite que el Girona se presente en el escenario europeo bajo su propia identidad y méritos, fortaleciendo su posición como un club independiente y competitivo.

Además, la capacidad del Girona para navegar por estas aguas regulatorias y demostrar su independencia será fundamental no solo para su participación en la Champions League, sino también para su desarrollo y reputación futuros. En septiembre, el himno de la Champions podría resonar en Montilivi, simbolizando no solo un logro deportivo, sino también un éxito en la afirmación de su identidad y autonomía.