El accionista mayoritario busca recuperar los beneficios urbanísticos del actual Mestalla
Peter Lim, el accionista principal del Valencia CF, ha presentado una demanda que amenaza con bloquear la finalización del nuevo estadio durante al menos dos años. Esta demanda, interpuesta contra la Generalitat y el Ayuntamiento, surge a raíz de la caducidad de la Actuación Territorial Estratégica (ATE), que regulaba la construcción simultánea del nuevo estadio y la demolición del actual Mestalla.
La demanda, registrada en la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana a pocos días de las elecciones autonómicas y municipales, es notable. Las fuentes informan que los asesores de Lim en Valencia le sugirieron que esperara los resultados electorales, anticipando posibles cambios en la administración que podrían facilitar las negociaciones.
Negociaciones dificultadas por tensiones interpersonales
Las relaciones tensas entre Layhoon Chan, presidenta del club y mano derecha de Lim, y algunos representantes municipales, como la candidata del PSOE a la Alcaldía, Sandra Gómez, han complicado las conversaciones. No obstante, ante la incertidumbre de un cambio en la administración municipal, Lim ha decidido seguir adelante con la demanda, utilizándola como herramienta de negociación.
El efecto inmediato de la demanda es que la operación urbanística del nuevo estadio y del Mestalla actual se bloqueará por un período de al menos dos años, tiempo que los expertos legales consultados estiman que podría durar la resolución de la demanda. Además, Lim gana una carta fuerte para negociar con posibles compradores, quienes pueden mostrarse reacios a asumir la incertidumbre jurídica que supone esta demanda.
Intención de recuperar la ATE y sus beneficios
A través de su demanda, Lim deja claro que busca recuperar la ATE, cuya caducidad considera ilegal. Si logra recuperar esta figura urbanística, tendría nuevamente el derecho de vender los terrenos del actual Mestalla sin tener que finalizar previamente el nuevo estadio, como se requiere actualmente. La venta de los terrenos del Mestalla actual podría proporcionar una solución financiera a dos desafíos importantes.
Primero, permitiría a Lim evitar tener que desembolsar dinero para equilibrar las cuentas anuales del club, que debido a su gestión problemática, siempre presentan pérdidas. Segundo, los ingresos podrían utilizarse para saldar parte de la deuda del club y presentar un prospecto de venta atractivo para potenciales compradores. Fuentes de las administraciones demandadas expresaron su asombro por la decisión de Lim de presentar esta demanda en un momento en que el club se enfrenta al riesgo de descenso.
