36,9 millones de euros de beneficio neto y una reducción de la deuda de más de 30 millones de euros (de 124 millones a 90). Ni el fichaje escandaloso de Gareth Bale ha puesto en aprietos la gestión económica del Real Madrid de Florentino Pérez. Puede que a la hora de ganar títulos no sea el mejor presidente, pero en números nunca se vio un Madrid igual, que actualmente ocupa el primer puesto en la lista Forbes de clubes más ricos del mundo. Tan brillante es la gestión, que con el 60% de los beneficios de una sola temporada el Madrid podría poner punto y final a su deuda.
El pasado ejercicio se cerró con unos ingresos de 520,9 millones de euros, 1,3% más que el curso anterior. Según destacó el presidente, los números son, por noveno año consecutivo, “los ingresos más altos del mundo en la industria del deporte”. Y todo teniendo en cuenta que el gasto personal en futbolistas aumenta año a año. Este curso del 45% al 47,2%. Se incrementan los costes y lejos de empeorar, los números mejora. Unos números sencillamente impresionantes.
