Ante la situación de crisis económica que vive el planeta, son sólo unos pocos privilegiados los que se podrán permitir ver en directo el próximo mundial de Brasil 2014. No obstante, ahí no queda todo. Así, ver el evento deportivo por televisión desde el salón de casa saldrá seis veces más caro que hace algo más de una década, cuando se celebró Corea y Japón 2002.
Esa es la conclusión a la que ha llegado la consultora argentina Tomadata. Y es que según sus cálculos disfrutar de un encuentro en casa costará alrededor de 50 euros si tenemos en cuenta la comida y las bebidas que se pueden llegar a consumir en el hogar en un evento de este calado. Precio muy por encima de los 8 euros con los que se podía costear un banquete parecido en 2002.
Además por si esto fuera poco, cabe destacar que aunque el poder adquisitivo ha subido en la última década, no lo ha hecho tanto como los precios, por los que no serán pocos los aficionados que tengan que conformarse a ver el mundial con la simple compañía del televisor y un simple refresco. Y es que la crisis también afecta hasta a los hechos más comunes como puede ser ver un partido de fútbol desde casa con los amigos.
