Ceferin contempla la posibilidad de llevar la Champions League hasta Estados Unidos

La UEFA estudia la opción de expandir el fútbol europeo en el mercado estadounidense

Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, ha abierto la puerta a la posibilidad de que la Champions League se juegue en Estados Unidos en un futuro cercano. En una entrevista reciente, Ceferin afirmó que “es posible” y que este proyecto ha estado en estudio durante algún tiempo. 

La idea de que la máxima competición del fútbol europeo se dispute en ciudades como Los Ángeles, Nueva York o Atlanta es algo que la UEFA ha estado considerando desde hace un tiempo. A pesar de que el calendario actual de la competición ya tiene programadas las finales de los próximos años en diferentes ciudades europeas, Ceferin sugiere que la fecha para este gran cambio podría ser en 2026.

La Champions League a Estados Unidos

El atractivo del mercado estadounidense

La UEFA se muestra seducida por la idea de llevar la Champions a Estados Unidos, ya que el fútbol ha ganado una gran popularidad en el país en los últimos años. Según Ceferin, “los estadounidenses están dispuestos a pagar una gran cantidad por lo mejor”, lo que hace que el mercado estadounidense sea muy prometedor para el futuro del fútbol europeo. El atractivo del mercado estadounidense y la creciente popularidad del fútbol en el país hacen que esta opción sea cada vez más plausible. 

Durante la entrevista, el presidente de la UEFA también destacó que las finales de la Eurocopa han sido vistas por más personas en Estados Unidos que las finales de la NBA. Sin embargo, Ceferin también mencionó un problema con la diferencia horaria entre Europa y Estados Unidos que podría afectar a la audiencia de la Champions League si se llevara a cabo en territorio estadounidense.

Posibles beneficios y desafíos de llevar la Champions a Estados Unidos

La expansión del fútbol europeo en el mercado estadounidense podría traer consigo una serie de beneficios, como la inversión en el deporte y la promoción del fútbol en el país. Además, esto podría generar nuevas oportunidades para los clubes europeos, tanto en términos de ingresos económicos como de visibilidad en el extranjero.

Por otro lado, también hay desafíos y obstáculos que la UEFA deberá enfrentar al llevar la Champions a Estados Unidos. Entre ellos, la mencionada diferencia horaria que podría afectar a la audiencia y la necesidad de adaptarse a un mercado con características diferentes al europeo. Será interesante ver cómo evoluciona esta idea en los próximos años y cómo podría afectar al fútbol europeo en el futuro.